AYUDA PARA EL CAMPO

En la CUMBRE DE LAS AMERICAS EN PANAMA, el Presidente Juan Manuel Santos tuvo un encuentro con el Secretario General de la OIT.
Acordaron firmar un acuerdo en los próximos meses, para formalizar el empleo en el campo colombiano. El Secretario de la OIT, ofreció su colaboración para incrementar la generación de empleo.
Hoy quiero ser atrevido, insolente. Irrespetuoso, tal vez.
Para tratar sobre el campo colombiano, no es necesario, no hubiera sido necesario acudir en busca de colaboración, a una persona que no nos conoce.
“Si necesitas una mano amiga, búscala al final de tu brazo”
Acá no más, tenemos un científico cuyo apellido me recuerda una marca de bicicletas de carrera: Lugari.
Hace 45 años, “craneó” la creación del CENTRO EXPERIMENTAL LAS GAVIOTAS, en medio de las sabanas del Vichada. Una simple visita a este interesante e importante personaje, habría rendido frutos de inmediato.
La reunión no puede llevarse a cabo en Suiza, ni en la Casa de Huéspedes Ilustres de Cartagena, ni en el Club El Nogal, sino en plena selva, para que admiren lo que este soñador ha logrado hacer. Deberán asistir los ministros del trabajo y de agricultura y algunos de sus genios asesores.
Veamos un solo ejemplo: sembró 8.000 hectáreas de pino tropical, en pleno corazón de nuestros Llanos Orientales.
A continuación, voy a enumerar algunas de las realizaciones de Lugari:
* Cocina solar.
* Secador solar de ropas.
* Destilador solar de agua.
* Cultivos hidropónicos.
* Cultivo de cachama en lagos.
* Bombas hidrostáticas para elevación de agua.
* Bombas de camisa.
* Arietes para acueductos y la agricultura.
* Turbinas hidráulicas a filo de agua.
* Turbinas hidráulicas de baja caída.
* Fábrica de calentadores solares de agua (Más de 30.000 instalados por todo el territorio nacional).
* Producción de agua natural embotellada.
* Producción de biodiesel.
* Arados y herramientas para el campo…

Lo dije antes y lo repito hoy: no somos un país tan rico como para chatarrizar el parque automotor cada 15 años.
Tampoco para tener esta fábrica de ideas prácticas llamada Gaviotas, sub empleada.


Paulo O. Cuartas C.