Esta mañana de miércoles, me puse feliz con la noticia sobre el pre acuerdo entre Fecode y el MEN (MEN?)
Podrá ser verdad tanta belleza?
Resolví escribir unas lineas, pero caí en un bache, del cual no he podido salir, porque no se qué palabra debo utilizar: suspicaz? Perspicaz? Son sinónimos? son antónimos?
Veamos tres asuntos al respecto:
- Con el Ministerio: validación de competencia. Quién hace los cuestionarios? La de los tintos?
Las preguntas deben ser única y exclusivamente, sobre la materia que dicta el maestro.
No importa que el profe de matemáticas, ignore cuánto crece una guadua en el día o cuántos dientes tiene un mosquito?
Para que le sirve al maestro de biología saber cuál es la altura de la pirámide de Keops?
- Con los maestros: cursos de capacitación. Muchos, acreditan grados y pos grados en culinaria; sobre meditación y cien bellezas de esas mas. En que los mejora esto para sus clases?
Los estudios deben ser sobre la materia que dicta el maestro.
- Fecode: es frecuente; muy frecuente; demasiado frecuente, que los niños, a lo largo y lo ancho del país, no tengan clases porque, "los viernes los maestros tienen permiso sindical".
Por qué este permiso tiene que ser, obligatoriamente, en horas laborales? En horas que perjudican al alumnado?
Otra perla: que la evaluación sea de yo con yo. Rico, no, don Pepe.
Colombia ocupa el penúltimo lugar en las pruebas PISA. Pienso que Fecode no ha movido el menor músculo del dedo meñique, para mejorar en ese sentido.
Será que soy muy suspicaz? Será que soy muy perspicaz? Todavía no se qué palabra usar correctamente.
De todos modos, pienso que los tres puntos relacionados antes, tienen relación con el vergonzoso lugar en Pisa.
Señores de Fecode, programen cursos de capacitación en aritmética, en geometría, en lenguaje, en sociales para los maestros, pero sin sacrificar el horario de estudio.
Mejorando el nivel del profesorado, saldremos de ese vergonzoso penúltimo lugar.
Recuerden después de finalizada la partida, al rey, a la reina y al peón, los guardan en la misma caja.
Paulo O. Cuartas C.
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